miércoles, 24 de julio de 2013

La suerte de Poncio ( Primer relato )

Concurso Veraniego de Relatos Cortos Nº 8

Nº 7, Amarillo, rojo y verde
Nº 6, El fantasma de playa La Barrosa
Nº 5, El mirón de la montaña
Nº 4, Un verano maldito
Nº 3, Un verano candente
Nº 2, EL REGRESO DE LOS DIOSES
Nº 1, Golpe de calor justiciero





Comprobarán ustedes si Poncio es un hombre de suerte o no lo es, es decir: un hombre con buena suerte o con mala suerte. Veremos que la suerte es cambiante, esquiva, remolona, jodedora, caprichosa... lo que quieran. Es muy suya.
Pero dejemos a este Poncio, al que todavía ni siquiera conocemos ( aún no le he dado ni una pista a la sagaz Doña Leona ) y vayamos con otro personaje del relato, "el otro" personaje del relato, pues el resto son comparsas. En un relato es más fácil ahorrarse personajes que en una peli. ( En el anterior me sirvió con un matrimonio dicharachero y la colaboración de un toro y un cabo de la guardia civil ) Bueno, miento, también aquí hay una colaboración especial: Vicente )

Vista superficialmente es una tía buena en bikini de color malva, tumbada boca abajo sobre una toalla playera con motivos marineros, ( delfines felices y barquitos veleros ) larga melena negra recogida con un lacito a juego con el bikini, piel muy morena y un libro bajo su mirada atenta, la última novela de la autora de ficción histórica Teresa Coscojuela: "Santiago Matamoros contra los invasores de Reticulín"
Si nos acercamos mucho más leeremos su nombre en el DNI que guarda en el bolso: Cristina Falconetti Garmendía, 37 años, hija de Paolo y Jesusa, nacida en Torrejón del Jodorrio, Madrid. Esta belleza playera es española de madre idem y padre italiano, y trabaja en la empresa de creativos publicitarios "Imaginary and Entertaining Company", un nombre muy español si se traduce.







( Imágenes playeras para dar un poco de colorido al relato. En las fotos de más arriba: Alicante, lugar en donde transcurre la historieta )



"Muere, reticuliniano infiel!", y de un certero espadazo segó la cabeza del humanoide escamoso que se negaba a abrazar la fe en Cristo Nuestro Señor" A pesar de lo interesante de narración coscojuelana, Cristina alzó la mirada porque la gente de las toallas y sombrillas próximas estaban haciendo comentarios en voz alta sobre un extraño individuo que caminaba por la orilla, entre los bañistas y las sombrillas de la "primera línea de playa", la de las familiadas madrugatas. Pronto adivinó el motivo del chismorreo. Hasta entonces había visto de todo a la playa: ligones playeros con musculitos y sin musculitos, barrigones deprimentes, imbéciles jugando a la pelota o con perros, pederastas babeando delante de los niños, emigrantes vendiendo gafas de sol o cedés... Pero aquello era inédito para ella, y para todo el mundo, aquello no lo había visto jamás porque aquello no se veía desde "los locos años veinte" El caballero en cuestión vestía un bañador como los que se usaban en el primer cuarto del pasado siglo. Cristina se puso a cavilar, pues a fin de cuentas era lo suyo como creativa: Publicidad de alguna discoteca?, un amante de la moda camp?, alguna firma de bañadores tratando de "regresar" a esta moda primitiva?, o quizá simplemente un excéntrico o loquito actuando por su cuenta?...




Pero esta vez falló la perspicacia de la publicista, ya que no se trataba de nada de eso. Admiró, eso sí, la gallardía y la serenidad con la que paseaba aquel hombre, sin inmutarse, como si no fuese el centro de todas las miradas y comentarios. Aquel sujeto encerraba algún misterio y Cristina se quedó con las ganas de saberlo. Su mirada no era la de un loquito, le pareció un hombre templado e incluso inteligente. Por qué se paseaba por la playa con un bañador de la época de maricastaña?
Tuvo una brillante idea que la impulsó a seguirle, pero el individuo ya se había perdido entre la multitud de playeros que colmaban la playa de San Juan en Alicante. No obstante recogió la toalla, se puso la chanclas e inició la búsqueda. Debía encontrarlo a toda costa, era el hombre que necesitaba!

Aquí concluye un relato para concurso, pero la historia tiene su continuidad en el siguiente relato para concurso, je, je!, es decir: son relatos independientes para los votantes, pero se complementan en el posible interés que suscite la historia para los lectores. ( En cuanto una historia se me alarga un poquito, me veo obligado a trabajar así, Doña Leona, usted lo sabe. Pero si hay un poblema, con poner ambas partes fuera de concurso, solucionado )

7 comentarios:

  1. Pues no dejas con el intringulis

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  2. Y lo voy a dejar más tiempo, porque quería poner ahora la segunda parte y me encuentro con que hoy el puto ciber de la biblioteca sólo da 30 minutos, así que me voy a poner una chorradita en Facebook. Esta mañana en mi barrio he puesto el post de mi blog.
    Buen día!

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  3. No nos podemos permitir el lujo de poner un relato fuera de concurso, sobretodo siendo todos tan buenos y si usted lo desglosa en dos independientes, bienvenidos sean porque a mí también me gustaría dar continuidad al fantasma de la playa La Barrosa.

    No hay ninguna norma que impida seguir un relato. Las normas se hacen para impedir problemas medianamente previstos y continuar un relato como otro aparte, se trata de esto: OTRO. Así que cada uno será votado independientemente.

    Espero que nuestra tripulación no tenga nada que objetar, ya que suelo canviar las normas según el funcionamiento de la Comunidad. Supone una ayuda de todos para llevar a buen puerto nuestro galeón. Todos participamos, todos tenemos derecho a voz y voto, yo sólo soy la capitana que pone orden y administra el blog.

    Interesante relato, Don Mejillón. ¿La "hibrida" de italiano y española lee las coscojueladas históricas? ¡Juas juas! Se debe divertir un huevo, je je je...

    No sé, no sé... igual el tipo ese del bañador decimonónico era mí tío, el que hizo la mili en Sidi Ifni, ver mi comentario en http://comunidadblogsperiodoco.blogspot.com.es/2013/07/amarillo-rojo-y-verde.html
    Porque así se disfrazó en el camping El Toro Bravo, aunque este estaba (ya feneció) en una playa de Viladecans (Barcelona), afectada por la ampliación del aeropuerto de El Prat. El Toro Bravo, La Ballena Alegre, Tres Estrellas, Filipinas... Todos al carajo por el aeropuerto. Y con ellos su fauna y flora.

    Este artículo es de 2005:

    http://elpais.com/diario/2005/10/01/catalunya/1128128838_850215.html

    Y muestra la destrucción del entorno verde a dos pasos de Barcelona.
    Bueno, ya me he ido por las ramas -como de costumbre-...

    ¡Ansiosa espero el siguiente relato!



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    Respuestas
    1. *CANVIAR no, Cambiar.

      Cosas del catalán... Y no me apetece rehacer el comentario ;D

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    2. Se han ido al carajo tantas cosas por el "avance imparable de la civilización!" Dígaselo usted a los indios americanos del Norte o a sus homónimos amazónicos.
      Pues nada, si la tripulación objeta, no tengo nada que decir, se me aparta al apartado "fuera de concurso" y ya está, para mi no es nada grave, ya sabe que me gusta es participar, nada más, sea concursando o sin concursar.
      Have a nice weekend! ( No la traduzco nada porque ya se lo sabe todo, je, je! )

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    3. No creo que nadie objete nada, como mucho, puede que al conejo sinvergüenza le dé por soltar alguna chorrada de las suyas, pero él no tiene voto en nuestro galeón, je je je...

      Cierto, no necesita traducirme, después del "Treason" del fantasma de la playa La Barrosa, ya soy una experta, ¡juas juas!

      Bon cap de setmana!

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    4. Viva el entendimiento sin barreras lingüísticas!

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Lamentamos que exista moderación de comentarios, pero es necesario debido a ciertos anónimos muy persistentes.