martes, 12 de marzo de 2013

Anécdotas de un mejillón y una leona. III





CINE. "No es una peli del Oeste, hombre"

Tengo un tío amigo de uno cuyo trabajo consistía en rellenar escenas de películas con el "ganado" habitual: los extras. Así es como varios miembros de la familia y amigos participamos en algunos rodajes en Barcelona.
En casa de mis tíos solíamos reunirnos diariamente un grupito, Jaume, Manolo, José y yo. Ellos eran antiguos compañeros de trabajo, todos a la calle cuando cerró la empresa farmacéutica, conque desocupados buscando un curro.
Una tarde, mi tío me dijo que necesitaban gente para 'Una mariposa sobre el hombro', una peli policiaca con Lino Ventura. Tenía que presentarme al día siguiente, cuando las calles aún no están puestas, en el Hotel Colón, vestida con elegancia pero de viajera y llevando una maleta. Por supuesto, estaba dispuesta.

Pero mi tío me aconsejó que se lo contara mi madre. Pasaba que esos días no me hablaba con ella por una discusión muy gorda que tuvimos y como conocía bien a su hermana, me dijo: "Anda que si te ve salir de casa, aún de noche y con la maleta...". ¡Ja ja ja! Era verdad, así que durante la cena rompí mi silencio y se lo conté. Bueno, ahí hicimos las paces y a la mañana siguiente se levantó para verme vestirme y maquillarme, y... comprobar que la maleta estaba vacía, ¡juas! Incluso me acompañó a la parada del autobús, no fueran a violarme.

Los preparativos de un rodaje llevan horas y te puedes aburrir o divertir bastante, depende de lo que haya. Pasaron lista, nombrando a cada uno por el nombre y apellido, excepto uno: "La señora del perro". ¿? Salía un perro, pero digo yo que su dueña debía tener nombre, ¿no? Se ve que el responsable del "ganado" andaba despistado y se le olvidó anotarlo. Me pregunto si a la hora de pagar hicieron poner al chucho la pata entintada en el recibo, je je je...

La peluquera estaba cabreada porque todas habían ido con el pelo recién lavado y no podía peinarlas. Usó un montón de botes de laca para conseguir que los cabellos tuvieran la necesaria consistencia para darles forma. Conmigo no hubo problema por tener una cabellera espesa y abundante.
Hay que tener en cuenta que todas llevaban el pelo más o menos igual, según la moda del momento y había que hacer distinciones porque se trataba de viajeras, no de un paseo de vecinas por el barrio.

Pero lo divertido fue cuando el realizador examinó a nuestro amigo Manolo de arriba abajo con aire inquisitivo y dudando. Éste se había puesto la ropa más elegante que tenía -y que nosotros no le habíamos visto porque no la usaba a diario-, un pantalón de pana nuevecito y con parches de polipiel en los bolsillos, je je je... Al fin exclamó: "¡Que no es una película de vaqueros, hombre!".

Naturalmente, a Lino Ventura no lo vi ni de lejos.



8 comentarios:

  1. Hola, buena mujer!

    "La chica de la maleta", creo que esto es el título de alguna película, tengo una vaga idea. Trenes!... todo un mundo de ilusiones, qué buenas escenas de trenes nos ha brindado el séptimo arte!... destacando, por supuesto, "Asesinato en el Oriente Express", una novela de Agata Christie convertida en una película fenomenal y en la que podemos gozar de un reparto de lujo. Qué rabia, no recuerdo ahora quién es el actor que hace un Hercules Poirot genial. Y magistral el plano secuencia de una Ingrid Bergman madurita, toda una lección del mejor arte dramático, varios cambios de estado anímico siguiéndola la cámara durante la friolera de siete minutos. Algo que te hace amar el cine más todavía. Sigo...

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    1. Pues sí, Claudia Cardinale protagonizó 'La chica con la maleta' en 1960. Mi maleta era roja y por entonces tenía yo aspecto de espía, je je je... No recuerdo qué llevaba debajo, pero sí el abrigo, negro de napa, con el cuello, puños y bajos de imitación piel.
      Tengo una foto con ese abrigo, si la encuentro la añadiré.

      El actor de 'Asesinato en el Orient Express' era Albert Finney. Vi la película, pero no la recuerdo mucho, la verdad, prefiero la novela, como siempre.

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    2. Exacto, Albert Finney!... Bordaba el papel, un actor magnífico!

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  2. "Los preparativos de un rodaje llevan horas", y tanto!... pero no dejan de joder y siguen haciéndote madrugar. La interpretación que hizo Fernando Fernando Fernán Gómez de esta idiosincrasia peliculera no tiene desperdicio: "De qué os quejais?, es el único oficio en el que te pagan por esperar" Otro actor, no recuerdo quién, dijo: "No nos pagan, nos indemnizan por las esperas"

    Excelente su relato, en un tono simpatiquísimo y con un cierta aire de añoranza. Añoramos los buenos momentos y tendemos a olvidar los malos. Es lo que nos hace vivir.

    Pues mejor que no conociese a Lino Ventura, a lo mejor no le convencía "en el vivo y en el directo", suele pasar, je, je!, muchos ídolos se nos caen cuando los tenemos delante.

    El hombre del pantalón de pana nuevo se equivocó de película. Le cuento una mini anécdota mia al respecto del vestuario. Sigo...

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    1. Bueno, 500 pesetas por ponerme guapa y pasear una maleta vacía no estuvo mal, total, entonces no tenía otra cosa que hacer y esa cantidad no estaba mal en la época, era un pellizquito para gastos personales.

      Gracias. Cierto, se añora lo que te hace pasar buenos ratos, es inevitable, pero como usted dice, recordarlo siempre ayuda mucho porque queda por encima de lo malo.
      Al menos, así lo hacemos los que somos normalitos, porque hay algunos a los que les encanta ir de víctimas, ¡uf!

      Hombre, no era fan de Lino Ventura y me dió lo mismo no coincidir. Nunca se me ha ocurrido pedir autógrafos ni nada semejante, debe ser un coñazo para los famosos y de lo que más huyo es de que me consideren una pesada.








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  3. Me cabreaban un montón los rodajes o grabaciones televisivas en los que tenías que llevarte la ropa de casa, generalmente los productos de bajísimo presupuesto. Pues bien, fui cargado con varias prendas, pues no tenía muy claro como lo querían, portándolas en una percha de esas de viaje. Todavía no tenía coche ni carné y el desplazamiento era desde mi casa en Alcalá de Henares hasta Pozuelo o Aravaca, no recuerdo bien, de punta a punta del mapa de Madrid haciendo trasbordo de trenes. Era para un episodio de Crónicas Urbanas y sólo tenía un par de frases con Quexé Parra. Le presento la ropa al realizador para que elija, al gordo Ricardo Palacios, y me dice que vale con la que tengo puesta. Protesto: "Coño, y para eso me habeis hecho venir cargado", y me responde con toda su socarronería: "Te jodes"

    Buen día, Doña Leona!

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    1. ¡Vaya excursión! Y encima, en vez de mochila, cargando con perchas, cuidando que la ropa no se arrugue, ¡puf!

      La lástima es que a mí no me llamaron nunca para algo de época, con lo que me gusta disfrazarme.

      Buen día y buenos recuerdos, Don Mejillón.

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    2. No era de época, era ropa actual. Igualmente, felices añoranzas teatreras!

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Lamentamos que exista moderación de comentarios, pero es necesario debido a ciertos anónimos muy persistentes.